La microempresaria Ingrid Vergara, ingeniera en gestión industrial y técnico en química analítica y su pareja Fernando Rodríguez, contador auditor, decidieron asociarse en octubre de 2015 y crear panadería y minimarket “Masterpan” en el barrio Ulriksen, de La Serena, liderando en el mercado con sus productos artesanales y de calidad, entre ellos sus panes fricas y de completo.
Masterpan forma parte de las más de 30 microempresas de panaderías y pastelerías de la región de Coquimbo, que participan en el programa “Aprende” que está desarrollando la Federación Chilena de Industriales Panaderos (Fechipan), y que cuenta con el apoyo del programa Viraliza de Corfo.
Ingrid Vergara rememora que con su pareja y socio trabajaban en minería. “Decidimos arriesgarnos con una panadería. Él se encarga de la producción y yo de las ventas. Es difícil trabajar en familia, pero con madurez, altura de mira y cariño se logran sobrellevar las dificultades”. Abrimos en el barrio Ulriksen cuando era residencial. Ahora se ha convertido en una avenida comercial. Tuvimos una excelente acogida. En el nombre tenía que ir algo que nos diferenciara, que dijera, que somos líderes en la elaboración de pan”, asevera.
En Masterpan trabajan 9 personas, entre ellos 2 maestros panaderos, elaborando hallullas, marraquetas, colizas, y su especialidad, son sus panes frica y de completo. “Es nuestro nicho de mercado, en el cual me atrevo a decir, que somos líderes en la cuarta región. Es producto de la mano de obra excepcional de nuestros panaderos y nuestra receta que es única. No hemos encontrado un pan igual al nuestro, en la región. Nuestros clientes reconocen, la calidad de nuestras materias primas. Este conjunto da el secreto para tener una buena calidad”.
Producto de la pandemia “Masterpan” apostó por la venta delivery, debiendo actualizarse con herramientas, que le ha entregado el programa “Aprende”. Ingrid Vergara resalta que “los beneficios han sido el aprendizaje en el manejo de las redes sociales y el marketing digital, de estrategias comerciales de venta, de programas a emprendedores, y sobretodo el acompañamiento de Fechipan en todo este período de pandemia, a través de los profesionales que ha puesto a disposición, de las charlas de capacitación online, que nos han entregado de manera gratuita. De cómo vender mejor los productos, de cómo crear una estrategia de valor. No sólo vender pan, sino una experiencia al cliente”.
La ingeniera comercial Jocelyn Carrasco en su última asesoría, entregó a Ingrid Vergara una “Estrategia y Plan de Reactivación” con el diagnóstico de la panadería, sus fortalezas, debilidades, las brechas, su visión, objetivos estratégicos en el área financiera, de mercado y operativas, con sus respectivas propuestas de valor.
El balance del programa “Aprende” en la región, ha sido positivo destaca Christian Ortega, gerente de Fechipan explicando que “históricamente la panadería tradicional se administra desde los costos. De gastar menos, que de poder vender más. Las estrategias que llevamos a cabo, relacionadas con mejorar las competencias en marketing y con el mejoramiento de los salones de venta y con la digitalización, siempre son positivas, porque le va a dar una nueva arista al negocio. Cuando ven que hay posibilidades de ampliar su negocio, explorando nuevas alternativas, la mayoría de las veces, son bienvenidas estas actividades. Siempre el balance va a ser positivo”, enfatiza Ortega.
Sobre la importancia de dar valor al sector, el director regional de Corfo, Gregorio Rodríguez, indicó que “se están incorporando tecnologías y conocimientos para lograr una diferenciación de los procesos industriales del retail, permitiéndoles evolucionar como una alternativa de alimentación saludable, moderna y amigable con el medio ambiente. Queremos promover en las panaderas y panaderos el desarrollo de una industria que está arraigada en las y los chilenos, y para eso, también es fundamental la utilización y manejo de canales digitales, que también son implantados en el programa, como mecanismo de promoción de esta oferta”.
Los objetivos del programa “Aprende” son disminuir las brechas de la industria, entregando capacitación y acompañamiento a empresarios, mediante talleres y asesorías, para su transformación digital, reconversión de sus modelos de negocios y la reactivación económica de las empresas del sector bakery
El programa se inició en el mes de enero con un diagnóstico que identificó la brecha digital de empresarios. Luego se realizaron talleres virtuales: “Canvas: cadena de valor, los nuevos procesos a implementar en la panadería”; “Cómo desarrollar una estrategia digital para panaderías y pastelerías”; “Adecuación de canales de venta para la reactivación”; “Fuentes de Financiamiento” y “Redes de Colaboración”. Ahora se encuentra en la etapa de asesorías en que se les entrega una estrategia y plan de reactivación.
En la región de Coquimbo hay un catastro de 623 panaderías, de ellas el 69,5% son microempresas, un 29,1% pequeña empresa y 1,3% mediana empresa. El sector tiene una venta anual de 64 millones de kilos de pan, con $115 millones de dólares al año.
Carmen Moreno Carmona, Periodista.